El gimnasio para el alma

El gimnasio para el alma

Vinicio Jarquín C., 21 de julio de 2017

Esta mañana me senté frente a mi escritorio para empezar a trabajar, pero es viernes y tengo un estado de ánimo diferente, no tanto porque viene el fin de semana, sino por lo logrado en estos días, por lo aprendido en las clases de martes y jueves, por las grandes negociaciones cerradas esta semana, porque todo lo tengo en orden con los clientes, por los sueños realizados a lo largo de tantas décadas de vida, por lo que me espera en PNL para mañana, y porque siempre, al levantar la vista, Luis Fer está de pie para acompañarme y para seguir caminando juntos.

Puse música para empezar a trabajar, pero me dejé llevar y pasé de una canción a otra y a otra, y así se me pasó toda la mañana.

¿Cómo me siento?, como si mi alma hubiera sido manguereada. Recordando lo vivido en los seminarios Insight y en algunas experiencias maravillosas que he tenido en lugares alejados del planeta. He hecho, sin quererlo o planearlo, un recorrido por mi corazón, sintiendo la permeabilidad de mi alma, cuando ambos –palpitan- al unísono.

Recordé algunas lágrimas derramadas en Broadway, sensaciones irrepetibles de pie en las arenas del desierto de arabia, junto a las aguas del Golfo Pérsico, y cuando descubrí mi esencia después de presenciar el más formidable atardecer africano, navegando por el Nilo.

        Hoy… fui al gimnasio para ejercitar mi ser integral.