Insight IV (en progreso)

INSIGHT IV (en progreso)

Santiago de Chile - Enero de 2018

Diario en progreso...

Diario de viaje

San José de Costa Rica

Antes de viajar a Chile

22 de noviembre de 2017

Casi no puedo recordar el día que decidí hacer el Insight I, y la ilusión que eso me causaba. Pero tengo en mi memoria la sensación que me embriagaba cada vez que en una reunión de presentación, venían "los más avanzados", algunos que habían hecho el II y que los veía como grandes y superiores. También llegaban aquellos que habían hecho el III y claro que un par de los que en algún momento fueron participantes del famoso y "temible" Insight IV.

Era como estar en sexto grado de la escuela y escuchar hablar a "muchachos" de quinto año de secundaria. Aquellos que cuando estábamos niños nos llamaba la atención que algunos hasta tenían barba y las mujeres pechos desarrollados (o en desarrollo). Y ahora aquí estoy, sin pechos ni pelos en la cara, pero aquí estoy. Ya soy uno de esos "iluminados" e "inalcanzables". Estoy a las puertas de ser un Insight IV.

El 7 de junio de 2017 terminamos el Insight III, siendo la primera generación de ese nivel en Costa Rica. Acompañado de grandes amigos. Muchos de ellos conocidos desde el I, otros que se agregaron en el nivel II, y otros que solo en fiestas había visto, pero ahí estábamos todos subiendo a esa nueva clasificación, con el conocimiento interno propio que eso implica.

Sólo tres días después, nos fuimos de viaje poco menos de un mes. Un crucero por el Danubio que despertó en mi gran sensibilidad, principalmente en el paso por Polonia, viendo los guetos y los campos de concentración, y dándome cuenta que a pesar de todo, la humanidad siempre sale adelante. Siempre renace como lo hacen el "papavero rosso" entre las piedras de las líneas del tren, en la Toscana italiana, pero eso es otra historia.

Regresamos a Costa Rica el 2 de julio, y el 15 de ese mismo mes tomé la decisión de hacer el seminario en Santiago de Chile, a pesar de que había pensando que tal vez eso no era para mi.

Un día después alquilamos un apartamento en Vista Los Andes, en las Condes, muy cerca del lugar en donde estaremos casi un mes. Un lugar pequeño, pero hermoso, que servirá de refugio para cuando regresemos muy cansados, algunos días.

Esta será una nueva experiencia. Es la primera vez que tomamos un curso de Insight fuera de nuestro país. También, y aunque una o dos veces al año estamos de vacaciones fuera de Costa Rica, por aproximadamente un mes; usamos diferentes hoteles. Esta vez estaremos todas esas semanas en el mismo lugar. Por lo tanto siento que será más que un viaje, sino que viviré un mes en Santiago de Chile.

El 3 de julio tuve mi primer contacto con uno de los participantes, que no conocía en persona. Damian Hurtado de Bolivia, y yo, nos agregamos a las redes sociales, y establecimos una comunicación cercana, fuera del chat oficial.

Un día después, en una conversación sensible, traté de tocar su alma. Le sugerí que saliera, de donde fuera que estaba, y que lo hiciera para brillar. Le dije que tal vez Santiago sería el mejor lugar para renacer, para abrir sus alas, para volar con la fuerza que tiene guardada. Le ofrecí mi mano en ese proceso.

Esta relación con Damian amplificaba mi ilusión de ir a Chile. Ya tenía a alguien que quería conocer en persona. Ya me había abierto con él y sería bonito que los consejos que le di esa tarde, pueda aplicarlos a mi vida. Revisar que tan abiertas están mis alas y que tan alto estoy volando.

La información de nuestro apartamento dice que es independiente, ubicado en el último piso del edificio, con terraza privada y una excelente vista panorámica del distrito financiero y comercial más importante de la ciudad. Dice que podremos encontrar a menos de un kilómetro todo lo que pudiéramos llegar a necesitar, como supermercados, parques, centros comerciales, metro, clínicas, teatros, restaurantes, cines, etc.